Si quieres saber los motivos por los que te pueden despedir en el trabajo, te invitamos a que nos acompañes. Mencionaremos las razones más comunes, explicando las cualidades de cada uno, para que te hagas una idea y puedas modificar tu comportamiento o prepararte para un despido inminente con o sin justificación.
Índice de contenidos
¿Por qué me pueden despedir en el trabajo?
Como hemos mencionado, bajo ciertos escenarios los empleadores te pueden despedir. Sin embargo, deben seguir algunos criterios, y en ocasiones realizar advertencia o notificación previa. Conoce cuáles son los tipos de despido para identificar de forma temprana los motivos.
Incapacidad e incumplimiento
Si un trabajador no es capaz de cumplir con las actividades laborales, es motivo suficiente, aunque no de forma inmediata, para rescindir contrato. Es decir, mientras se puedan tomar otras vías, como un asesoramiento o reasignación laboral.
Sin embargo, no debemos confundir incapacidad –que puede ser por ejemplo, debido a una enfermedad– o actividades que no corresponden a su área de formación profesional, con incumplimiento. Siendo este último la falta de responsabilidad de las tareas asignadas. Traducción: si no haces las tareas y actividades, te pueden despedir.
Cierre del área de trabajo
Si una empresa decide cerrar un área de trabajo, o prescindir de un puesto profesional, es un motivo por el que te pueden despedir. La mayoría responde a razones económicas, o productivas –que dicha área de trabajo no es lo suficientemente rentable como mantenerse operativo–, así que el empleador prescinde de esas actividades. Bueno, hay que tener en cuenta que pueden reasignarte a otro puesto, o a una sucursal de la empresa, pero ten en consideración, que también puede ser una causa de despido.
Ilegalidad para trabajar
Si mentiste en alguno de los papeles para trabajar, y no te encuentras apto, normalmente es que te despidan. Una infracción de este tipo es muy grave, implicando consecuencias legales tanto para la empresa –si se descubre por entidades autorizadas–, como para el trabajador –por falsificar y mentir en un contrato–.
Actos externos
Incluso si eres un buen trabajador, y cumples fervientemente con todas las actividades, te pueden despedir del trabajo por acciones externas. Esto se ha convertido en algo común: despidos por razones de la vida privada. Como los comentarios en las redes sociales que influyan en la imagen corporativa de la empresa.
Bien, aquí sucede algo similar a lo que hemos venido mencionado, y es que normalmente se recibe una advertencia o aviso por un comportamiento poco profesional. Es un escenario que debe tratarse con la mayor objetividad posible, debido a que la vida privada no debería ser un motivo de despido.
Combinación de varios motivos
Sí, un poco de cada motivo mencionado anteriormente puede clasificarse como razón de despido. Por ejemplo, inconsistencia en la entrega de actividades laborales, inasistencias, actos externos que se van acumulando e influyen negativamente en la imagen de la empresa, incapacidad por una enfermedad prolongada y así sucesivamente. Lo normal es que una empresa clasifique diferentes faltas y, cuando llega un punto, entonces se avisa del despido.